La selección genética salva vidas a costa de causar cuantiosas muertes.
La nueva ley de reproducción asistida permite utilizar embriones como niños medicamento bajo un concepto terapéutico, artificioso y de profundo sesgo demagógico.
La imparable escalada de progreso y desarrollo tecnológico y la modernidad social están alcanzando cotas insospechadas al mismo tiempo que notables estragos. La nueva cultura de utilitarismo cosificador en la que el ser humano es reducido a algo con el que se puede “curar”, jugar, experimentar y abiertamente manipular, da paso al conformismo de una sociedad que se va perfeccionando en acotamientos científicos huérfanos de humanidad y espiritualidad.
Asimismo, la información que nos llega es parcial y torticera. Para implantar un óvulo fecundado que sea compatible y pueda reportar en un futuro la cura o la reparación de un hermano, previamente se han destruido varios de esos óvulos a través de una criba selectiva. A la sazón estudios fidedignos y rigurosos demuestran que en ocasiones de 28 óvulos experimentados solamente llegan a ser embriones compatibles unos 6, el reto a la basura.
Todo ello demuestra que para subsanar males, la maldad y la perversidad se tienen que esgrimir con antelación, para que después solamente de un 70% a un 87% de los casos sea viable curar una enfermedad genética y de un 30% a un 50% una leucemia.
Con todo ello, la nueva y aberrante ley de reproducción asistida en España promocionada por el PSOE en un alarde de política progre y beneficiosa, permite la generación de embriones con fines no reproductivos, da vía libre para fecundar cuantos óvulos se estime conveniente, además se considera la acumulación de embriones sobrantes que da paso a la posible investigación con éstos o con los creados por clonación para análogos fines.
Por cuanto antecede, deberíamos reflexionar la sociedad en su conjunto y especialmente los intelectos dedicados a la ciencia acerca de esta deformación ética y moral en el entendido de que los embriones son seres humanos a los que se les están mutilando con el objeto de poder sanar a otras personas que han tenido la suerte de no ser rechazados en los orígenes incipientes de la vida. En honor a estos viles asesinatos, propugnemos crear el estatuto jurídico del embrión para no segmentarles la vida que define y clasifica la eventualidad de los países superdesarrollados en los que lo material prima sobre lo humano, y la mentira grandilocuente oculta a la debilitada verdad.
vicenbarbarroja
La imparable escalada de progreso y desarrollo tecnológico y la modernidad social están alcanzando cotas insospechadas al mismo tiempo que notables estragos. La nueva cultura de utilitarismo cosificador en la que el ser humano es reducido a algo con el que se puede “curar”, jugar, experimentar y abiertamente manipular, da paso al conformismo de una sociedad que se va perfeccionando en acotamientos científicos huérfanos de humanidad y espiritualidad.
Asimismo, la información que nos llega es parcial y torticera. Para implantar un óvulo fecundado que sea compatible y pueda reportar en un futuro la cura o la reparación de un hermano, previamente se han destruido varios de esos óvulos a través de una criba selectiva. A la sazón estudios fidedignos y rigurosos demuestran que en ocasiones de 28 óvulos experimentados solamente llegan a ser embriones compatibles unos 6, el reto a la basura.
Todo ello demuestra que para subsanar males, la maldad y la perversidad se tienen que esgrimir con antelación, para que después solamente de un 70% a un 87% de los casos sea viable curar una enfermedad genética y de un 30% a un 50% una leucemia.
Con todo ello, la nueva y aberrante ley de reproducción asistida en España promocionada por el PSOE en un alarde de política progre y beneficiosa, permite la generación de embriones con fines no reproductivos, da vía libre para fecundar cuantos óvulos se estime conveniente, además se considera la acumulación de embriones sobrantes que da paso a la posible investigación con éstos o con los creados por clonación para análogos fines.
Por cuanto antecede, deberíamos reflexionar la sociedad en su conjunto y especialmente los intelectos dedicados a la ciencia acerca de esta deformación ética y moral en el entendido de que los embriones son seres humanos a los que se les están mutilando con el objeto de poder sanar a otras personas que han tenido la suerte de no ser rechazados en los orígenes incipientes de la vida. En honor a estos viles asesinatos, propugnemos crear el estatuto jurídico del embrión para no segmentarles la vida que define y clasifica la eventualidad de los países superdesarrollados en los que lo material prima sobre lo humano, y la mentira grandilocuente oculta a la debilitada verdad.
vicenbarbarroja
posted by vicenbarbarroja at 10:24 AM
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